Por Vanessa Díez.
Nadie es profeta en su tierra. Ni los genios. El festival de cine AFI (American Film Institute) ha ofrecido un homenaje a los 25 años de la productora de Pedro y Agustín Almodóvar, El Deseo. Se proyectó su primera película La ley del deseo (1987) que fue tan polémica en su estreno, ya que al contener escenas de sexo anal explícito entre hombres las mentes conservadoras se opusieron a ella. Carmen Maura mojada tampoco tiene desperdicio. La polémica con Pedro siempre está en primera línea, porque no hay nada mejor que tener el lujo de poder romper las reglas de la narrativa. Además ofrecer ante la cámara aquello que existe oculto, lo que nadie se atreve a dejar salir. Abrir la caja de Pandora libera los fantasmas. El problema es que nadie más se atreve y se escandalizan, juzgando y encorsetando su trabajo. Las mentes libres no pueden dejar de crear mundos propios. Pedro es un creador que ha madurado a través de su obra con el paso de los años ofreciéndonos un análisis cada vez más profundo sobre la naturaleza humana.
Su hermano Agustín agradeció el homenaje y lamentó que su Pedro no tuviera en su tierra el reconocimiento que se merece. España tiene cosas buenas, pero también cosas muy malas, sobre todo con personas como Pedro, que son inclasificables y muy libres.
Para Antonio Banderas Almodóvar aporta algo nuevo en un mundo que tiende a globalizarlo todo. Todos nos parecemos mucho y él es como un vaso de agua en el desierto.