Sarah Burke, la nieve se queda sola.
por Vanessa Díez
A todos nos llega la muerte, por mucho que no queramos. Si tuviera que elegir moriría como Sarah Burke, haciendo lo que más amo en este mundo, lo que más feliz me hace y en lo que pongo toda mi energía. Era especialista en esquí libre, ‘freestyle’, su reina. Su belleza no la alejó de su pasión, aunque la aprovechase para sus objetivos al salir en publicaciones como FHM. Nat Schirman, entrenador del equipo español de freestyle la califica como «La sonrisa de la nieve». Ganó cuatro veces (2007-08-09-11) los ‘X Games’. A sus 29 años, era una especialista en el ‘half-pipe’, lo demostró ganando el campeonato del mundo de esta modalidad en 2005. «Tenía algo especial, fue una pionera. Una de las primeras personas que se metió en el tubo con los esquís», afirma Schirman. Abrió camino en el estilo ‘superpipe’, junto con Kristi Leskinen.

Ambas fueron competidoras y también se enfrentaron a hombres en sus especialidades, es lo que tiene llegar las primeras, hay que provocar los cambios. Fue la primera mujer que dio un salto con una rotación de 1080 grados durante una competición. «Era muy competitiva, pero su meta no era la victoria (…) su objetivo era impulsar este deporte, definirlo. Hacerlo lo mejor posible, no cabe duda, pero siempre desde el compromiso, intentando que la gente joven progresase y amase la nieve como ella lo hacía» destaca Schirman. Ganó el Premio a la esquiadora del año de ESPN en 2001 y un premio ESPY (Premio de Excelencia en el Rendimiento Deportivo Anual) como Mejor Acción Mujer 2007 en la modalidad de atleta deportiva. Ella fue quien presionó al Comité Olímpico Internacional (COI) para que su modalidad deportiva entrase en los Juegos Olímpicos de Invierno de Sochi 2014 (Rusia). Era una de las favoritas al oro olímpico para los próximos Juegos de Invierno, los primeros en los que el esquí libre entra a formar parte de los deportes olímpicos. «Creó un estilo propio. Fue una gran embajadora y deja este deporte en la cima, en lo más alto.
La comunidad del esquí estamos muy agradecidos por todo el trabajo que ha hecho. Ya la echamos de menos. Gracias Sarah», afirma Nat Schirman. Un fuerte golpe durante un entrenamiento la dejó en coma, pero murió tras una semana debatiéndose entre la vida y la muerte. El deporte extremo sobre nieve está de luto. Una de las primeras en lamentar su muerte fue la esquiadora Julia Mancuso, campeona olímpica en los Juegos de Turín’06 (Italia) y doble medallista de plata en Vancouver’10. «Muy triste por la noticia acerca de Sarah Burke», escribió Mancuso en su ‘twitter’. «DEP, mis pensamientos y oraciones van para su familia y amigos y la comunidad del esquí», añadió. «Es una perdida enorme. Ella era la máxima expresión de este deporte, su esencia», dijo Nat Schirman. Gracias a las contribuciones su familia se libera de la factura de los cuidados a la esquiadora. “Las contribuciones futuras se utilizarán para establecer una fundación en honor al legado de Sarah y promover los ideales que valoraba y personificó» (Michael Spencer). Burke ha pasado a la historia.