Pues eso, que aquí seguimos. Después de haber sobrevivido a más de una desgracia, a una crisis que se ha llevado por delante las ilusiones de no pocos amigos, a unos meses repletos de alegrías y –por suerte, pocas- penas e, incluso, a un supuesto fin del mundo, seguimos. Unos mejor, otros peor, pero aquí estamos. Hoy, recién estrenado el 2013, podemos echar la vista atrás y ver cómo los 365 días que nos han precedido pueden, como en otras ocasiones, darnos una lección y servirnos de cuaderno de viaje, de agenda de vida, para ver qué hemos sido, qué somos y qué podemos llegar a ser.
Aún así, dejando a un lado las reflexiones antropólogo-filosóficas y sin querer que me mandéis a freír espárragos por repipi o que me confundáis con un “teenager” de estos que “peta” –así lo dicen, ¿no?- sus redes sociales con las típicas listas de cosas hechas y por hacer en el año que se fue, lo que no debemos olvidar es que el 2012 sonó, y mucho (y muy bien).
Por ejemplo, ¿quién no recuerda los bailes que nos pegamos en el SOS 4.8 de Murcia? Gran festival, sí señor, pues además de bailar tuvimos la suerte de disfrutar de workshops y actividades varias en cuanto a creación artística. ¿Y qué me decís de los buenos ratos que hemos pasado frente a las tablas de un escenario mientras se nos caía la baba con los dulces Klaus and Kinski o los enérgicos Polock? Por no hablar de cuando tuvimos el placer de disfrutar de un intimísimo concierto de Chinese Christmas Cards o de las emociones vividas junto a Lucía González y su acústica puesta en escena y junto a The Cranberries en Madrid (que demostraron que han vuelto con fuerza y ganas).
Fiestas junto al mar tampoco han faltado. ¡No nos hemos privado de nada, compañeros! Recuerdo cómo saltamos al ritmo de los Zombie Kids en Alicante, arropados por la brisa del mar y, aun siendo de madrugada, comiéndonos lo que quedaba de día. De hecho, este dúo de Djs nos sirivió de calentamiento para disfrutar posteriormente del Low Cost Festival de Benidorm, donde si que no tuvimos tiempo ni de sentarnos a tomar el aire, ¿acaso se podía detener uno a perder los minutos que separaban a actuaciones tan impresionantes como las de The Sounds, La Casa Azul, Placebo, Two Many Djs…?
Por desgracia, paralelamente a la fiesta vivida en directo –de la que se ha intentado “croniquear” hasta donde ha sido posible incluyendo los casos en los que se ha tratado de flamenco (véase Miguel Poveda) o de canción melódica (como ocurrió con Raphael) y a algunas entrevistas que nos han hecho pararnos a pensar –no olvidaremos nunca a la enigmaica Najwa Nimri-, este 2012 también fue un periodo de despedidas, un momento de decir adiós a personas tan influyentes para nosotros como Hilario Camacho , Bernardo Bonezzi (Los Zombies), Luís Gomis (Los Sírex), el “Reverendo” Ángel Muñoz, entre otros.
Visto lo visto, solo nos queda esperar que este 2013 llegue sonando igual de bien y cargado de buena música, que las ganas de bailar y disfrutar ya las ponemos nosotros.
Feliz Año, amigos.