El misterioso Pepito Grillo de Prin’ La Lá
Por Sandro Maciá
De lo onírico hicieron música. Eso es lo que dijeron muchos de los críticos que se toparon con este descubrimiento andaluz hace un tiempo, en el momento en que tres niñas dieron el salto desde el mundo del anonimato hacia la senda de las ondas radiofónicas –o de las imágenes Youtuberas, como se quiera- para dejar de ser sólo eso, tres chicas, y pasar a ser las Prin’ La Lá.
Según su presentación en sociedad, a cargo de Eureka Records, la historia de estas jóvenes que disfrutan con la simple compañía “de sus gatos , su conejo, sus tres caballos y sus seis San Bernardos”, así como de los discos de Simón & Garfunkel o cantando en un coro, es tan romántica como inocente. De hecho, su inmersión en el universo de sueños que recrean en sus propias composiciones nace de sus influencias por la serie “Embrujadas”, por los libros de Edward Gorey y los antiguos films de Walt Disney (Chitty Chitty Bang Bang, Mary Poppins o Fantasía).
Y sí, hablamos de música y de composición propia, con total desparpajo y conciencia, pues pese a su naïf descripción y el halo de artístico misterio que desprenden, Macarena, Blanca e Isabel nos han ido dejando boquiabiertos en cada trabajo, en cada nueva entrega que ha acontecido desde el célebre Esto es Prin’ La Lá (2007) hasta Un nuevo orden (2012), sin olvidar anteriores Eps y otras producciones, todas ellas al abrigo de Fernando Vacas (guitarrista y cantante de la conocida banda Flow).
Prueba de ello, de esta paradójica combinación de inocente dulzura y certero saber hacer, es el nuevo proyecto que próximamente presentará el grupo, una obra conceptual compuesta por tres video-creaciones para tres canciones hechas por tres artistas, que se podrá adquirir en un cofre acompañado de una llave.
Tres, de tres, por tres. Pese a lo abstracto de la idea, este proyecto, grabado en Estudio Eureka con la colaboración de artistas como Pablo Novoa (Golpes Bajos), en las guitarras, se basa en la elección del propio Vacas de una canción sobre la que versará el trío de creaciones: aquel inesperado tema fruto del trabajo de dos polos casi opuestos, Germán Coppini y Nacho Cano, que lleva por título Pepito Grillo.
Según cuenta la leyenda, y así lo explica Prin’ La Lá al dar a conocer este misterioso cofre, “dicen las malas lenguas que Nacho Cano se había convertido en el más enfervorizado fan de Germán Coppini, hasta el punto de unirse en un proyecto común”, es decir, Pepito el Grillo, donde Germán se rendía a su propio talento: «Soy la sombra que has perdido al comenzar a andar. No sentirse el ser querido. Mi mandato está incumplido. Que nos queda ya, este grillo abatido no puede ahora cantar».
¿Ansiosos? ¿Deseosos de conocer esta pieza hiperrealista y mágica, este Pepito Grillo, la Voz de la Conciencia, que vendrá acompañada por dos temas de corte del mismo estilo pero más abstracto? ¿Desesperados por ver las video-creaciones que, para cada una, han ideado Concha Vacas, Jack Dopller y Laura Martinova? Pues habrá que esperar al 15 de diciembre, día en el que verá la luz una Edición Limitada de 333 copias numeradas de lujo que contiene una llave antigua (pendrive) dentro de un cofre, ofreciendo así un pequeño pero completo homenaje “al arte y sobre todo a Germán Coppini”.