Experimentar con el arte en el Día Internacional de los Museos
Por Vanessa Díez.
Traspasar cortinas de poemas en cada sala. Que te acaricien. Intentar descifrar el mensaje. Querer leer. Deleitarte. Compartir. Lo interesante del arte contemporáneo es poder ser parte de la obra de arte, que la instalación forme parte de tu experiencia. Muchos artistas contemplan el que tú seas también la obra, sentir, tan sólo sentir. Ayer fue el Día Internacional de los Museos y en muchos lugares hubieron actividades, todavía estás a tiempo de asistir a cualquier exposición aunque habitualmente no tengas costumbre, el arte no tiene porque ser tan sólo para entendidos, no hay porque desarrollar ninguna teoría, sólo ser y para ello tan sólo existir.
¿Te imaginas cien bombillas que vayan al ritmo de tus latidos? ¿e incluso que acompasen el ritmo de tus latidos y de la persona que te acompañe? Pu pum pu pum Si estás sólo y en ese momento entra en la sala una bella mujer puede resultar problemático, pues todo se acelera, además imagina que se detectan, muestrean y procesan tales datos y pasan a formar parte de la exposición, será una prueba de tu existencia, de tu paso por la misma; pero ello hará que recuerdes esa instalación, “Almacén de corazonadas”. Para su autor, Rafael Lozano-Hemmer, “no se trata de celebrar lo que es la tecnología, si no utilizarla para generar diversos tipos de sensaciones”, pues nueve son las instalaciones que el artista mexicano trae con “Abstracción Biométrica” a Madrid al espacio Fundación Telefónica, obras de arte que recrean tu respiración, cómo te mueves e incluso cómo hablas para unir lo que te identifica con otros.
¿Te arriesgarías a experimentar una obra de arte que pudiera llevarte a la muerte? Porque no, si lo hacemos cada día al exponernos al tráfico, a la polución e incluso a las drogas, experimentar los límites para sentirse vivo. Las cortinas de poemas que todavía recuerdo son de Jaume Plensa, estuvieron hace años en el IVAM, cuando tuve la oportunidad de ver la obra de Sorolla en gran formato. Él mismo animaba en una entrevista al espectador a que atravesase las cortinas sin miedo a tocarlas.»Penetrar en el espacio, tocando sin recato la obra de arte”. «Esas cortinas no existen sin el público, además de que en ellas hay un pequeño homenaje sentimental a las cortinas metálicas que protegían a las tiendas de moscas». Para Plensa, el tintineo que producían aquellas cortinas (clinc, clinc) era «bello, me gusta evocarlo con estas instalaciones». Los artistas trabajan con todo aquello que tienen a su alcance ya sea papel, cartón, palabra, imagen, sonido, tecnología, bombillas, cortinas … y por supuesto los recuerdos son la base, para finalmente aunar los propios con los de otros, ya sea en directo o no.
Por si Madrid os queda muy lejos, el IVAM en Valencia celebra su XXV aniversario con una exposición sobre «Arte Iberoamericano en la Colección del IVAM» un recorrido por 41 artistas de distintos países. Una trayectoria sobre los creadores iberoamericanos desde la época de las vanguardias hasta hoy, ya sea con trabajos sobre pintura, escultura, fotografía, fotomontaje, instalaciones o audiovisuales. Una mirada al arte. Traspasar las barreras. Conocer. Compartir. No somos tan distintos, experimentar es la base para crecer en un mundo cada día más globalizado que interactúa y exporta su modo de sentir, su manera de vivir.