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El 2015 en 15 nombres

Por Sandro Maciá

Top 3, top 5, top 10… ¡A tomar viento las convencionales listas de discos! Llega la Navidad y, con ella, el aquí firmante se ha propuesto acabar el año con un nuevo tipo de recopilación, con una selección que, aun siendo poco habitual, está hecha con todo el cariño hacia los que aparecen en ella y -no menos importante- con todo el respeto a los no incluidos.

Y es que, si algo fue el 2015, es fructífero. De ahí el deber que asumimos en Letrasenvena de recorrer los meses ya pasados rememorando, antes de lanzarnos al 2016, qué 15 bandas o cantantes nos conquistaron -tanto desde su estudio como sobre las tablas-.

De esta manera, sin tener el orden siguiente mayor relevancia que la de seguir la cronología natural de cada trabajo, no podemos dejar de aplaudir a:

  1. Pasajero. Con ellos iniciamos el año, descubriendo, con su Parque de Atracciones (Ernie Records), que además de ser atrevidos se mantuvieron consecuentes con su primer trabajo, Radiografías (2013), ofreciendo un segundo Lp, que se presentó desde el propio sello como “una llamada de atención, un grito a la cordura desde el sinsentido”, frase que suscribimos, a día de hoy, con la boca bien abierta.
  2. Nueva Vulcano. Embajadores del ímpetu y la furia, ellos fueron los encargados de hacernos saltar con Novelería (BCore Disc), un cuarto disco que, nuevamente en su haber, ha sido el culpable de que volviéramos a impregnarnos de sus letras y a rompernos los tobillos haciéndolas nuestras en festivales y pistas de baile. De ellos, ya comentamos que desprendían “un halo adictivo que, combinado con sus punzantes letras, permite digerirlo con la misma facilidad con que se acaba interiorizando”. Y así ha sido.
  3. Napoleón Solo. Con Máximo Ruíz Ferrer (Ernie Records), los granadinos nos ofrecieron un homenaje a la inversa, un original trabajo que fue creatividad pura y que nació, en palabras de la banda, de una idea clara: “siempre se hace un homenaje a alguien muy conocido. Se hace para continuar lo que hizo esa persona, pero en este caso es poner la inspiración en boca de un señor que no conocimos”. Bonita premisa, y buen punto de partida para un tracklist lleno de “pasiones, descubrimientos, creencias y otras revelaciones”.
  4. Juan Estereotipo & The Malajes. Su single Vilma llegó, como ellos dicen, “con su cajita de polvos mágicos y su botella de ron”, y no sólo estuvo a la altura de las expectativas que auguraban en cuanto a alegría y rock, sino que vino con divertidas dosis de golfería, acompañada de unas guitarras y una percusión que fueron dando cuerpo a una original manera de presentar a la musa de la canción, a la encargada de hacer sentir “ ‘wanderflein’ in the rain” a todo aquel que escuche su historia hecha single.
  5. Helena Goch. Su homónimo debut (Ernie Records) fue, según dijimos, “de dulce textura y compacto contenido, como si de un rico y esponjoso pastel se tratase”. Y es que, su talento viral aún nos tiene enamorados, tanto por la versatilidad de su voz como por la paz y melancolía de temas como Perhaps, Little Tiny Blue Men, Goodbye to you o Hopeless.
  6. Igloo. Libres de complejos, estos inconformistas autores de El Conjunto Vacío (Ernie Records, 2013), se entregaron al público con un disco muy especial: Igløø2, un recopilatorio de acústicos, versiones, remixes y temas que no tuvieron cabida en anteriores trabajos y que, por suerte para el mundo, salieron del olvido para convencernos de que, aun no siguiendo las señas clásicas del grupo, pueden ser tan valiosos y espectaculares como las composiciones a las que nos tienen acostumbrados.
  7. Maronda. Los creadores de himnos como Volverás, Vivimos en democracia o Cambiada, regresaron este año con Vibraciones (Autoeditado-Crowdfunding), un cd en el que, sin perder la esencia que marca y define a algunas de sus composiciones cumbre, transcurre por derroteros más eléctricos, ganando en potencia y fuerza.
  8. Gonzalo Alcina. Equilibrio y sensibilidad fueron las virtudes que nos permitieron conocer su mundo interior con Vértigo y tranquilidad (Crowdfunding), un precioso disco donde canciones como Daría, Tus pasos o Barba & Rock and Roll se nos cruzaron en el camino de una forma cercana, bonita y poética. Un trabajo artesanal donde se sienten y saborean las influencias de Jorge Drexler, Norah Jones o Quique González.
  9. Steven Munar. Gracias a 2000-2015, 15 Years Of Songs (Flor y Nata Records) redescubrimos quince composiciones de este artista que han ido marcando, año tras año, su carrera. Quince temas que se presentan tal y como se grabaron originalmente o en forma de versiones alternativas o novedades; pero no a la antigua usanza, es decir, no al estilo “The best of…”, sino bajo una selección que, en palabras del propio autor de las piezas que lo componen, recoge “aquellas que tienen una fuerte carga simbólica” o esas que “no se incluyeron en ningún disco por algún motivo, pero merecen ser editadas”.
  10. La Familia del Árbol. Desde Elche, el dúo formado por Nacho y Pilar, emprendió un homérico viaje de ida y vuelta con Odisea (Cydonia Records), un disco de nueve cortes de suave pop-rock psicodélico y dulce folk, que se va vertebrando sobre el contexto y el trasfondo del sentimiento constante de afrontar la hazaña de vivir como un reto, dejando claro que sus temas, paradójicamente, aun siendo actuales y originales, se ven impregnados de un carácter atemporal que siempre los mantendrá vivos.
  11. Emmerson. En el caso de los chicos de la ciudad del Turia, su lanzamiento llegó en forma de video, haciendo que En esta noche (corte extraído de Estabilidad Dimensional –Flor y Nata Records-) , diera el salto a los píxeles de dos dimensiones con una narración visual sencilla, festiva y tan despreocupada como la canción, consiguiendo que la imagen acaparara la atención del espectador al ritmo de las buenas vibraciones que sugiere el conocido track por sí mismo
  12. Alpaca Sports. Indie-pop y grandes referencias a Belle and Sebastian es lo que encontramos en su When You Need Me The Most (Elefant Records), un disco de hits animados, marcada percusión de aires propios de Cola Jet Set, y guitarras que, inconscientemente, nos llevan imaginarnos en los mismos paisajes que transitamos al escuchar a The School.
  13. Belako. Aún cerrando el año sin disco nuevo, sus singles Nomad y Track Sei traen nuevas oleadas de reverbs, claras voces y potentes atmósferas, lo que presagia cómo será su esperado Hamen y lo que justifica su condición de ganadores del Premio Ojo Crítico, que entrega desde hace 26 años el homónimo espacio cultural de Radio Nacional, con la finalidad de premiar a jóvenes talentos, fomentando su  difusión y promoción al comienzo de sus carreras.
  14. Alondra Bentley. Una vez más, la risueña Alondra alegró el otoño. Esta vez fue con Resolutions (Gran Derby), trabajo que mantiene su eclecticismo y el halo orgánico y puro de sus anteriores proyectos, pero en el que sus canciones se nutren de nuevos elementos, de novedosos aderezos que enriquecen cada composición y le otorgan, aun desde el inocente estilo de la artista, una nueva perspectiva. Es el caso de la onírica Pegasus, de la suave (pero no lenta) Remedy y de las pegadizas Effort and Joy, Suzzie o Water.
  15. Tachenko. ¿Hay mejor fin de año que un buen concierto? No. Por eso Tachenko marca el punto y final de esta lista, por haber sido artífices de un alegre, simpático y espectacular directo durante su actuación en El Sótano Indie Club (Elche, Alicante), donde ofrecieron un envidiable derroche de positivismo a través de la presentación de todas y cada una de las canciones de su último cd: El comportamiento privado (Limbo Starr).
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