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A quiet man, disco crooner desde Tarragona

 Por Sandro Maciá

Hagamos de nuestra vida una búsqueda de aquellos oasis que tanto necesitamos. Hagamos de nuestra existencia ese afán por encontrar momentos de paz, remansos de tranquilidad. Hagamos, de cada día, una aventura en la que no desperdiciar esos instantes de reencuentro con uno mismo… Ah, compañeros, hagamos lo que queramos, pero sin olvidar que la ausencia de prisa es esencial.

Y ya no es que sólo sea importante ahora, cuando podría parecer que todos debiéramos echar el freno y recapacitar tras los excesos navideños, por ejemplo. No. Tomarse el tiempo propio y necesario para según qué cosas es vital, porque sólo así pueden apreciarse detalles como la serenidad del talento, el lado bonito de la vida y, musicalmente hablando, algo bien hermoso, la belleza del crooning, un estilo que está de suerte estos días, pues perpetúa su vigencia –con la elegancia que merece- en la voz de A quiet man.

Bajo este pseudónimo es como el músico, cantante y guitarrista Fabio Vega hace llegar su esencia crooner desde su Sant Carles de la Rápita (Tarragona) natal hasta más allá de nuestras fronteras. Gracias a esto, siempre con una gradual evolución cualitativa y fiel a su uso del inglés como lengua sobre la que dar forma a sus composiciones de britpop, soul o jazz,  A quiet man ha ido forjando, a conciencia pero sin obsesión, una carrera de cuatro discos que, justo ahora, se amplía con el recién llegado quinto trabajo: ‘While You Were Sleeping’ (2016).

Siguiendo la estela de sus anteriores álbumes –en esencia y concepto, pues estilísticamente todos mantienen un carácter y unas variaciones propias-, este nuevo proyecto de quien ha tenido el privilegio de haber contado, a lo largo de los años, con las colaboraciones del mismísimo Steven Munar o de Sergio Makaroff entre otros,  nace de unas premisas que, nuevamente, hacen referencia al deleite en la tranquilidad, al disfrute de sentarnos y ver la vida justo “mientras duermes”.

Unas premisas que dan, como fruto de esa sensación de observar y sentirse observado cuando todos duermen, cuando llega la noche y nos rendimos al sueño dejando el mundo en paz, once canciones sentidas y directas. Once cortes que van y vienen entre íntimas, crudas y sensuales emociones mostrando una sencillez estructural nada sencilla –sí, como suena-.

Cercanas y delicadas, tanto por su forma como por su contenido, las composiciones de A quiet man en While you were sleeping, nos sumergen en sus ritmos ya en la primera nota de Baby, good luck –gran muestra de dicha cercanía, donde la voz irrumpe entre guitarras para ir viéndose arropada por atmosféricos sonidos, coros y hasta algún desgarrador grito-, tema que precede y encadena la lista formada por la susurrante I miss you 2 – sinceras palabras, entre muchas otras: “Every day I feel, every day I feel a little worse my dear”-, la auténtica Ask the stars –rotundo estribillo, precioso y coral-, la elegante Misty night, la ensoñadora Sweet dream of life –rasgado comienzo con posterior cálida melodía-, la alegre Anna –palmas, despliegue vocal y romántica declaración de intenciones incluida: “Anna don’t belong to anyone except my voice”-, las melancólicas Chances, Oh my love y Room for you–emotivas melodías, en algún caso con piano y dulces acompañamientos instrumentales, sirven al autor para expresar su pesar por el amor perdido, o casi-, la envolvente Lover come back home y la simpática y bailable Take it or leave it –un fin de fiesta de aire groove y feliz-.

En definitva, While You Were Sleeping, producido y mezclado por el propio Fabio Vega (autor de todas las letras y músicas del disco), y masterizado por Erik Veach en Crazy Daisy Studios en Portland (Oregon), es un trabajo sentido y para hacer sentir, una invernal sorpresa que, sin embargo, derrocha calidez.

 

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