El futuro es la mentira con la que justificamos la brutalidad del presente
Por Gemma Juan Giner
Hay libros que antes de leerlos ya te parecen desconcertantes. Hay títulos que te crean muchas dudas y portadas que no logras entender. Y esto es lo que me ha pasado con el último libro que acabo de leer. Cuando llegó a mis manos no conocía ni el libro, ni el autor ni la editorial, motivo más que suficiente para darles una oportunidad. Se trata de “El zar del amor y el tecno” de Anthony Marra, editorial Armaenia.
Su contraportada llamó mi curiosidad. “¿Por qué has intentado traicionar al gran futuro del
Socialismo? Porque el futuro es la mentira con la que justificamos la brutalidad del presente”.
Una novela compuesta por varios relatos, diferentes historias, todas cruzadas entre sí a través de un siglo, un continente y un reparto de personajes exquisitos. Desde la gran Galina, pasando por Kolya o Roman Osipovich. ¿Qué les une?, ¿qué les separa? Historias repletas de amor, guerra, política, engaños, muertes… a lo largo de 300 páginas conocemos la historia de un censor soviético de los años treinta que se dedica a corregir, de manera meticulosa, fotografías oficiales en los búnkeres de Leningrado; un coro de mujeres que cuentan sus historias y las de sus abuelas, antiguas prisioneras de un gulag, que fundaron su propio pueblo en Siberia; dos hermanos que comparten un fuerte amor en pleno derrumbamiento de la URSS o un mercenario prisionero en un pozo de Chechenia junto con un casete de mezclas que podría contener
el último mensaje de su familia.
La lectura de «El zar del amor y el tecno» arranca con una potente historia en que ya se cuestionan ideologías políticas y creencias religiosas, en la que se pone en evidencia el hecho de que la experiencia humana está llena de matices, de tonalidades, de decisiones y sentimientos que relativizan los grandes conceptos del bien y del mal. Una vez iniciada la lectura, verás que un capítulo te lleva a otro y que todo va cobrando sentido, pues todas las historias y todos los protagonistas forman un enorme rompecabezas. Así, veras como poco a poco todo cobra sentido, hasta el título de la obra y la imagen de la portada.
En definitiva, una novela social, política e histórica protagonizada por un gran drama psicológico. Atrévete y dale una oportunidad a este joven autor, Anthony Marra. Yo me quedo con una de las grandes frases de esta novela: “Convertir lo haría en lo hice es la gramática de la madurez”.