IV EDICIÓN ELCHE LIVE FESTIVAL 2019
por Ana Olivares
¡Todo un éxito! Así nos mandaban un mensaje a todos los compañeros de prensa, además de dar las gracias a todos los asistentes por nuestra comprensión ante las adversidades meteorológicas. Imagino que es la forma de suavizar las impresiones que se nos quedaron cuando el mismo viernes tuvieron que aplazar una hora el inicio del festival y justo cuando sólo tocaron los dos primeros grupos también hubo un parón obligado debido a la lluvia. Mi impresión es que no hubo demasiada previsión aunque hubiesen plásticos para proteger los instrumentos, y sin embargo, el año pasado sí que pospusieron el festival teniéndolo que repartir en dos fines de semana distintos para evitar justamente lo que pasó este viernes pasado. O se pasan o no llegan, pero en fin, es bastante difícil organizar un concierto a primeros de Abril, ya se sabe, lluvias mil.
Dejando esto a un lado, pudimos disfrutar de muchos grupos que se congregaron en nuestra ciudad para ofrecernos su mejor directo. Como siempre, los primeros lo tuvieron más difícil porque la gente aún no había comenzado a llegar, sin embargo hay que destacar la fuerza que pusieron tanto como Bauer o Correos, ambos con un indie personal y roquero que nos hicieron vibrar. Tras el pequeño parón comenzó SFDK calentando motores con su rap, justo cuando se llenó el recinto y la gente estaba más animada llegó Nach, el poeta rapero con sus letras profundas y las más coreadas. Y por último la Pegatina, que puso el broche de oro en este día con sus ritmos populares y salseros.
Unos 2000 jóvenes congregados coreando las letras de sus autores favoritos –según el diario Información-. Quizá es la edición que más popurrí hemos encontrado, ya que mezclaron indie con rap y electrónica, y es que tiene que haber de todo y para todos. Pese que a mí personalmente no me gusta nada el rap, sí disfruté mucho con Nach, aunque eché de menos las magistrales bases que suelo escuchar en sus discos, todo sea por la versatilidad e improvisación de sus directos.
Al día siguiente, con las aguas más calmadas empezaba la segunda tanda de conciertos con Polos, Embusteros, Olivia, Julieta 21 y Depedro, que nos prepararon de lleno para lo que estaba por venir, Fuel Fandango y sus magistrales con bases electrónicas flamencas, su fuerza en el escenario y la espectacularidad de su vocal, que nos hizo vibrar y movernos al son de los flecos que componían su vestido. Desde luego para mí los mejores de todo el festival –advierto que sólo es una opinión personal que nada tiene que ver con la realidad global-. Y ya para rematar la noche, Shinova, grandes, y finalmente el momento remember para muchos con Chimo Bayo.
¿Todo un éxito? Sí, lo fue, pero con bastantes peros. Hemos de reconocer el esfuerzo titánico de los organizadores para garantizar la seguridad y poder congregar a tan dispares artistas en un festival único que viene siendo la creme de Elche cada año. Pero, nos hubiese gustado cierta coherencia en las mezclas de grupos, o quizá menos cantidad pero mayor calidad. Estamos seguros de que el todo no se puede, pero tampoco podemos decir que ésta edición supere a la anterior cuando tuvimos el placer de gozar con menos grupos, pero de mayor repercusión mediática. El cambio de recinto también ayudó a la espectacularidad del escenario ya que estuvimos en la rotonda del Parque Municipal en mitad de nuestro Patrimonio de la Humanidad, una gozada, la verdad. Ahora ya sólo nos queda esperar qué grupos vendrán el próximo año y rezar para que cambien las fechas de la V edición para que la lluvia nos permita disfrutar plenamente de ellos.
