MENTIRAS CONSENTIDAS de Hjorth y Rosenfeld.
por Por Ana Olivares
VI. Serie Bergman.
Continuamos la serie de novela negra basada en Sebastian Bergman: el mejor psicólogo criminal de toda Suecia. Antes policía, fue degradado por sus desfases laborales relacionándose con mujeres sospechosas o víctimas de la mayoría de sus casos.
En la entrega anterior: Castigos Justificados seguía colaborando con la Unidad de Homicidios de Västerås, hasta que ocurrió lo inesperado al salvar a Vanja de ese coche bomba. Por supuesto, volvió a “cagarla”, y su superior, Torkel, decidió echarlo de la unidad anteponiéndose a los deseos de ésta. Su propia hija, a la que lleva un año sin ver y la misma que se trasladó a Uppsala para abandonar la unidad y su presencia.
Ahora él tan sólo se dedica a escribir novelas aprovechando sus dotes criminalísticas. Sin embargo, cuando Anne-Lie Ulander, comisaria de Upssala, le propone colaborar en un caso que tienen entre manos éste no lo duda. Tiene la oportunidad de intentar recuperar el respeto de Vanja. Pero le será difícil cumplir las normas que le han impuesto: luchar contra su propia naturaleza y mantenerse alejado del sexo para no entorpecer la investigación. Como bien explica en la novela <<El cortejo, la seducción y el sexo posterior eran una de las pocas cosas que todavía podían animarlo>>. Ya que sigue atormentado por la muerte de su mujer y de su hija pequeña tras el tsunami de 2004.
Como hablamos de la sesta entrega de una saga policial, también nos volvemos a encontrar con un elenco de personajes que han acompañado a Bergman casi desde el principio. Ursula sigue sabiendo que Sebastian Bergman es su alma gemela, por mucho que le pese, es con el único que se siente libre y auténtica; ni siquiera ha logrado solucionar sus problemas de comunicación con su hija Bella; ni le llena la relación con su amante. Y como siempre, nos sorprenderá su decisión final.
Vanja Lithner ha vivido un infierno desde que descubrió que Sebastian era su padre, además del peor compañero de brigada que se pueda tener. Tras el intento de suicidio de Valdemar, su padrastro y su actual investigación por malversación de fondos en su empresa, su relación está estancada y lleva meses sin visitar Västerås. Se trasladó a Uppala para alejarse de su padre, ya que además de complicarle la vida esté volvió a acostar con su madre, algo difícil de perdonar. Pese a que la última vez que lo vio éste le había salvado la vida, no quiere saber nada de él.
Por otro lado tenemos a Billy, el compañero de brigada más activo, ha tenido algún que otro afaire con compañeras de trabajo a pesar de que mantiene una relación estable con My. Ninguno de sus amigos sabe que oculta un oscuro secreto relacionado con la desaparición de Jennifer, una inspectora de policía que colaboró con la brigada en el libro anterior. Todos saben que se enrolló con ella, pero no esperan que tenga nada que ver con este extraño suceso. Y sin embargo, se nos presenta como la figura del policía que se vuelve “corrupto” por temor a ser descubierto.
Después tenemos a Torkel, quien ya divorciado, ha encontrado a una pareja encantadora con la que pretende pasar el resto de sus días.
Sebastian dejó de ser apreciado por ellos hace años, pero de nuevo, tendrán que trabajar juntos para resolver el caso y ayudar a Anne-Lie Ulander y a Carlos Rojas a capturar al violador en serie y asesino que está sembrando el pánico en toda Suecia. Parece estar relacionado con un antiguo grupo de mujeres que todavía no están a salvo de sus pecados del pasado.
Podemos hablar de una trama intrigante que pondrá a prueba el trabajo policial de este viejo equipo repleto de rencillas y experiencias personales ¿Alguien se ha creído que Bergman dejará de hacer de las suyas? Te invitamos a descubrir si dejará a un lado su insufrible personalidad y adicción al sexo por el bien común, o cómo siempre sucumbirá a la tentación por puro ego.
