La vida secreta de Sarah Brooks de Santiago Vera.
por Lara Vesga
El cadáver de la joven de diecisiete años Sarah Brooks aparece colgado de un árbol, bocabajo y completamente desnudo. La noticia destroza a sus padres, que además no tienen más hijos, y cae como un jarro de agua fría en Stoneheaven, un tranquilo pueblo estadounidense en el que nunca ocurre nada.
Entre los encargados de la investigación del suceso está el reportero local Declan Jacobson, el chico para todo del lugar, que tan pronto redacta noticias como ayuda al sheriff en labores como fotografiar escenas o también para aportar otro par de ojos y oídos extra, además del olfato periodístico, que ayuden a la resolución de los casos. Así, Jacobson se dedicará a reconstruir los últimos días de vida de Sarah Brooks y en esa búsqueda le acompañarán todos los lectores, asistiendo a un vaivén de sospechosos entre familiares, amigos y conocidos que cada vez se incrementa más hasta hacernos dudar de todos y cada uno de los personajes de la novela. Nunca mejor dicho, quien esté libre de pecado, que tire la primera piedra.
Santiago Vera (Barcelona, 1983) debuta con una novela adictiva con ciertas reminiscencias de Twin Peaks y la inolvidable búsqueda del asesino de Laura Palmer. Y es que Sarah Brooks también tiene una vida secreta que casi todos desconocen y solo entre las páginas de su diario se encuentra parte de la verdad de su historia.
Pero en «La vida secreta de Sarah Brooks» también hay secretos de la gente que rodea a la adolescente y que ella, por un motivo o por otro, queriendo o sin querer, acaba conociendo. Desmadejar todo este entramado de la vida oculta de los personajes de Stoneheaven será la misión del sheriff y sus ayudantes y también la de los lectores, que pasarán unas horas sumidos en la atmósfera atrapante de un pueblo en el que nada es lo que parece.