Duelo, cuarto disco de Medalla

Medalla, 2023. Foto de Lidia Arruego

Pódium alcanzado por Medalla

Tenemos una edad. Es verdad. Por eso, creo que a nadie sorprendo si saco a relucir aquí el dilema que a no pocos se le ha venido a la cabeza, tras la espectacular gala de los Grammy Latinos y sus -no exentos de polémica- repartos de galardones, sobre el valor intrínseco del que goza un premio versus el estatus o la valía que este puede alcanzar en función del contexto donde se de o a tenor de aquél que lo entrega… ¿Cierto?

Paja mental. Puede ser… De ahí que, al final, el que aquí vuelve a las andadas en lo de juntar letras para poder recomendar esos hitos musicales ante los que debemos rendir nuestra atención para el disfrute y degustación del talento invertido, acabe por llegar a una conclusión mucho más pragmática y, al hablar de galardones, se centre en el que lleva por nombre un grupo que, con estilazo y saber hacer, queda por encima de cualquier teoría para pasar al triunfo práctico: Medalla.

Valiente forma de autoproclamarse. “Olímpica”, llegamos a decir hace unos meses al hablar en estas páginas de ellos y al hacernos eco de su single Banderas a media asta… Adjetivos bonitos y contundentes, ¿no? Pues no menos merece este grupo formado por Eric Sueiro (voz, guitarra, sintetizadores), Marc López (batería, percusiones, coros), Joan Morera (guitarra, coros, sintetizadores) y Josep Peris (bajo, trompeta) ahora que, habiendo ondeado ya su single, presenta Duelo (2023), el  cuarto álbum de su trayectoria, que ve la luz al amparo de Estudio Mazmorra, su propio sello discográfico.

Como ven, nada de exageración en esta historia medallista. Al contrario. Si lo anticipado en sus canciones anteriores al lanzamiento de Duelo nos gustó, el hecho de poder comprobar, ya con la totalidad del tracklist entre las manos, que lo de encasillarse no es lo suyo y que el eclecticismo es algo a lo que no hacen ascos, nos flipa hasta el punto de afirmar que sí, que como reza la presentación de su obra, esta nos lleva a explorar en sus trece temas de duración, un todo narrativo que comienza con la breve pero premonitoria Umbral de sueños y que, antes de terminar con el homónimo corte que sirve de título al conjunto -y que nos brinda un relajante ratito junto a Valdivia-, consta de pasajes rockeros -ojo a Todo está enfermo-, de interludios psicodélicos -como Deriva-, de explosivas reminiscencias guitarreras -¡atención a la intro de Jardín de puñales!- y de momentos reflexivos -estructural y temáticamente hablando, como ocurre en Dardo o Soledad-.

Duelo, cuarto disco de Medalla

¿Disco introspectivo? ¿Disco derrotista? Ni un extremo ni otro. Medalla ofrece en Duelo un recorrido por sentimientos como el vacío existencial o la soledad, pero desde un punto de vista tan sincero -en lo referido a lo textual y rítmico- que les permite abordar temas intensos con aires luminosos, con el optimismo propio de quien reconoce sus emociones y las acepta para vivir con ellas, creciendo poco a poco, como lo hace el disco sonora y conceptualmente a cada escucha.

Producido por Sergio Pérez García (SVPER), productor habitual de la banda y de formaciones como Mujeres, Baiuca o La Bien Querida, Duelo puede conseguirse en edición de vinilo limitada, con doble portada de Lidia Arruego y lettering y 3D de Tumulus Design.

Pódium alcanzado. ¡Vamos, medallistas!