Pájaro a pájaro de Anne Lamott
por Lara Vesga
“Escribe como si tus padres estuvieran muertos”. De esa forma tan contundente, Anne Lamott (San Francisco, 1954), incita a todos aquellos que quieran ser escritores a escribir todo lo que uno lleve dentro sin que nada ni nadie le coarte. Hay que escribir, nos dice, como si te estuvieras muriendo y ya nada importara.
Con un torrente imparable de sarcasmo, la autora da en Pájaro a pájaro una clase magistral sobre cómo escribir que acaba siendo en gran parte un manual de instrucciones para la vida en general. Para Lamott, experta en narraciones autoficcionales donde trata temas como las adicciones o la maternidad, la verdad que cada persona encierra es lo único que merece la pena contar.
El título de esta obra parte de una anécdota de la infancia de la escritora. Siendo niños, su hermano estaba profundamente agobiado por un trabajo sobre pájaros que tenía que entregar al día siguiente. Para calmarle, su padre se sentó a su lado y le dijo: “Pájaro a pájaro, colega. Ve pájaro a pájaro”. Y es así como Lamott cree que hay que escribir: con tareas cortas diarias, ciñéndose a cosas concretas y sin intentar abarcar demasiado. Y, sobre todo, estando dispuesto a asumir que los primeros borradores que escribamos serán una auténtica y gran mierda. Pero teniendo en mente siempre que, para ser escritor, lo fundamental es algo tan simple como sentarse todos los días a escribir un rato. Otra historia muy diferente es lograr que se publique lo escrito, pero la publicación es algo a lo que la autora le resta importancia. Para ella lo gozoso y lo importante es el acto de sentarse ante una hoja en blanco y ponerse a escribir.
Ponerse como objetivo pequeñas tareas cortitas, darse el permiso de redactar unos primeros borradores infumables, mirar todo lo que nos rodea con ojos de escritor y llevar siempre encima una libreta donde apuntar todo aquello que nos llame la atención y que pudiera convertirse en material literario; recurrir a nuestra infancia si es que nos sentimos demasiado bloqueados, encontrar a algún alma caritativa que esté dispuesto a leer nuestros borradores y escribir con el horizonte de convertir nuestros textos en un regalo para alguien. Estas son algunas de las instrucciones de Pájaro a pájaro, un superventas desde su primera publicación hace ya más de veinticinco años, y un clásico alejado de los convencionales y encorsetados manuales de escritura que no debería de faltar en la estantería de nadie que quiera dedicarse a la escritura.