Una loba para un hechizo de Karah Sutton (autora) y Pauliina Hannuniemi (ilustradora)
por Rubén J. Olivares
Este libro es una oda a la fantasía a través del cual podemos descubrir el universo de seres fantásticos y mitológicos que pueblan el folclore ruso de la mano de sus protagonistas, la loba Zima, la pequeña humana Nadya y la enigmática bruja del bosque Baba Yaga. Dirigido a un público infantil-adolescente, este libro está repleto de mensajes positivos que ayudarán en la maduración psicológica y moral de los jóvenes lectores, tales como la importancia de ser capaces de enfrentarnos a nuestros temores y superarlos; cómo debemos actuar ante una disyuntiva moral (siempre tratando de hacer lo correcto y el bien), revindicado el valor de ser diferente a los demás como un modelo más de comportamiento, ensalzando la amistad, la familia, la confianza y la importancia de que el bien predomine sobre el mal para asegurar una sociedad justa para todo el mundo.
Su lectura es ágil, apasionante y fascinante, dado que la historia está narrada a través de capítulos cortos que se van entrelazando en diferentes tramas protagonizadas por distintos protagonistas de esta historia, tejiendo con ello un tapiz narrativo a través de cuyos hilos vamos recorriendo esta fantasía épica, para acabar descubriendo en sus capítulos finales el dibujo final que conforma esta historia. Esta escrito con acierto desde una perspectiva en tercera persona, desde la que nos vamos adentrando en la mente de cada uno de los personajes, haciéndonos revivir las emociones, aventuras y retos a los que deben hacer frente a lo largo de la misma, permitiéndonos conocer qué piensan cada uno de los personajes principales del otro y cómo se relacionan entre sí, dotando a la novela de una mayor claridad en su desarrollo narrativo. A lo largo de sus 318 páginas nunca me he llegado a sentir confundido o a perderme en el hilo de la trama pese a los diferentes saltos narrativos y cambios de perspectiva de los personajes principales. Su lectura ha resultado bastante sencilla de seguir y entretenida, manteniendo un nivel constante de intriga que invita a seguir leyendo, por lo que captará la atención de los lectores jóvenes a los que se dirige este libro.
El argumento es intrigante, misterioso y constituye una invitación a seguir indagando en la historia y en su posible resolución. Zima, una joven loba, debe acudir a la bruja del bosque, Baba Yaga, para solicitarle ayuda y salvar a su familia, aunque eso contravenga todo lo que le han enseñado. La vieja bruja, por su parte, ha permanecido durante años ensimismada en su cabaña, alejada del resto del bosque y de la civilización, tratando de permanecer oculta a cualquiera que pudiera perturbarla. Pero una amenaza se cierne sobre el bosque y deberá abandonar su cabaña para proteger al bosque. Para ello necesitará la ayuda de una joven loba que le permita completar un hechizo que salvaguarde al bosque. Y hete aquí que Zima, en busca de su ayuda, aparecerá en su puerta para cerrar un trato que permita a una salvar a su familia y a otra cumplir con su objetivo de guardiana y protectora del bosque. Baba Yaga lanzará su hechizo y antes de que Zima se dé cuenta, sus cuerpos se habrán intercambiado y se verán obligadas a aprender a manejarse en estos cuerpos que les resultan tan extraños.
Antes de que Zima sea capaz de asimilar su nuevo cuerpo de bruja humana, una niña, Nadya, llama a la cabaña, solicitando la ayuda de quien cree que es la bruja del bosque para frustrar los planes del malvado zar que domina las tierras de la zona y amenaza con destruir el bosque. Quizás la misión de Zima sea la de unirlas a todas: humanas, lobas y brujas contra la amenaza de un malvado zar que ambiciona mantener su poder.
El mundo que nos presenta Una loba para un hechizo de Karah Sutton resulta fascinante, repleto de seres mágicos que habitan en la imaginación de cualquier joven aficionado a la fantasía: brujas, animales capaces de razonar, aldeanos que viven en un mundo mágico y un entorno de fantasía que evoca la importancia de la naturaleza. Es apasionante adentrarse en la historia y dejarse atrapar por un bosque que parece dominarlo todo, con peligrosos arroyos que amenazan a quienes beben de sus aguas, plantas venenosas u oquedades que dan paso a simas e intrincadas cuevas que pueden atrapar a los incautos que caen en la misma durante días y, a pesar de ello, no puedo dejar de pensar que a cualquiera nos encantaría poder vivir en un bosque como este, que da cobijo y protección a sus criaturas y trata de defenderlas de quienes les amenazan. Es entretenido conocer la historia de la bruja Baba Yaga y su choza con patas de gallina capaz de desplazarse a cualquier lugar que ésta le diga, siempre que se lo pida con educación y amabilidad. Además, la naturaleza exuberante e indómita, el villano a quién deben vencer y el palacio en el que vive ayudan a añadir tensión a la misma, aumentando el interés por esta historia. A pesar de la oscuridad que rodea a esta historia, en ningún momento sientes que sea sombría o tenebrosa, pues los personajes no se sienten influidos por la misma, lo que resulta ideal para los lectores más jóvenes.
Los giros y cambios de la trama son geniales. Es difícil adivinar si Baba Yaga logrará regresar a tiempo para volver a transmutar su cuerpo con el de la loba Zima o cómo lograrán unir sus fuerzas para luchar contra el malvado zar. El clímax narrativo y el desenlace del mismo hacen que te mantengas pegado al libro, deseando saber más sobre el mismo.
En general, Una loba para un hechizo es una excelente historia de fantasía para un público adolescente y juvenil, mágica, hermosa, imaginativa y muy bien narrada centrada en el folclore ruso, con un trasfondo clásico de lucha entre el bien y el mal e ilustrado con maestría y belleza por Pauliina Hannuniemi, lo que convierte a esta novela en un libro ideal para el lector más joven de la casa.