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Las mujeres que faltan

Por Vanessa Díez

La revista fue fruto de una búsqueda personal. Me faltaban mujeres tanto en la asignatura de historia como en la de literatura, menciono éstas al estar entre mis predilectas, pero si alguna mujer hubiera surgido en matemáticas o en filosofía hubiera sido bienvenida, claro está, qué no hubiera dado por saber de Hipatia de Alejandría o de María Zambrano ya en aquellos años. Tan sólo había tres excepciones: Isabel I de Castilla, Teresa de Jesús y Rosalía de Castro. No me parecía lógico que no hubieran existido manos femeninas detrás de muchos de los hechos ocurridos en nuestro país. Parecía que las mujeres tan sólo se habían conservado como cuerpos de deseo, cada época ha tenido sus artistas femeninas predilectas, mujeres de familias humildes llenas de talento para el baile y la canción, adoradas por hombres poderosos que las encumbraron al éxito cobrando como precio su inocencia y su frescura. El resto han sido parte del olvido. Jamás quisieron que supiéramos de ellas.

La introducción comienza así: «Como usted imaginará no hay sólo cuarenta o cincuenta mujeres  importantes en la dilatadísima historia de España, hay miles, millones de mujeres que con sus actos diarios han contribuido a escribir su historia. Desde la más poderosa de las reinas tomando decisiones militares a la más humilde de las campesinas han servido para conformar el mundo que hoy conocemos». Un libro como éste hubiera agradecido en mis tiempos de primaria, que de forma tan didáctica me diera a conocer las mujeres que faltaban. Así se titula de forma muy acertada la introducción de este libro: las mujeres que faltan.

En «Heroínas secretas de la historia de España» tendremos un recorrido por las Mujeres en la conquista de América. Mencía de Calderón y Sanabria que terminó la empresa de su marido para llegar a la ciudad de Asunción, a mediados del S. XVI., ya que él murió por el camino. Inés Suárez, una mujer que fue parte activa en la conquista de Chile y no tan sólo amante de Pedro de Valdivia. María de Estrada, apodada «La vieja», fue una guerrera en la conquista de México en la época de Hernán Cortés. Mujeres guerreras y aventureras. Juan de Aragón nos explica que hubieron mujeres en la guerra mucho antes de la guerra civil, las milicianas no fueron las primeras. En la Castilla del siglo XIV estuvo Juana de Arintero, era la hija del conde García que se ofreció a luchar al no tener hermano varón que pudiera acudir a la guerra. Catalina de Erausto en el siglo XVII cambió la vida del monasterio por la vida aventurera y luchó en Chile contra los indígenas, llegando a alférez. También nos descubre a María Bernaldo de Quirós que en los años veinte del siglo pasado se convirtió en la primera mujer piloto y en la primera mujer en divorciarse. Mujeres intelectuales e ilustradas. Concepción Arenal, Carmen de Burgos, Clara Campoamor o María Zambrano. Nos hace llegar a otras como Beatriz Galindo, La Latina, que se convirtió en experta conocedora del latín, llegando a la corte para convertirse en profesora de los hijos de los reyes, pero fue mucho más, consejera de Isabel la Católica y una de las mujeres más cultas de la historia de España. O Luisa de Medrano, la catedrática, contemporánea de la anterior, que llegó a dar clase de latín y derecho en la Universidad de Salamanca. Elena de Céspedes que se convirtió en el siglo XVI en la primera cirujana, llegando a experimentar con su propio cuerpo un intento de cambio de sexo para disfrazar su condición de hombre. Josefa de Amar y Borbón que durante la Ilustración española, siglo XVIII, defendió la educación de las mujeres y su capacidad para desempeñar los trabajos realizados tradicionalmente por los hombres. Mujeres artistas. Las mujeres que se habían desarrollado en el arte en la mayoría de los casos eran hijas o mujeres de artistas, ya fueran pintores o escultores. Nos muestra algunas actrices y bailarinas, mujeres talentosas y supervivientes. Remedios Varo fue la artista del Surrealismo que por la Guerra Civil se exilió  a París y después por la ocupación de los nazis a México. Su mayor actividad como artista de varias disciplinas quedó allí, por ello tienen su obra  en el Museo de Arte Moderno (MAM), siendo una de las artistas de mayor peso en la colección del museo, en cambio aquí se olvidaron de ella.

El ilustrador Juan de Aragón nos trae en «Heroínas secretas de la historia de España» una selección de mujeres que destacaron en sus campos, mujeres olvidadas de nuestro pasado. También me he dejado por el camino deliberadamente en este artículo a muchas de ellas para que tengáis curiosidad en descubrirlas a todas. Merece la pena saber cuántas de nosotras hubo en el pasado en grandes afrentas, reflejos para las mujeres del mañana. Además el autor nos da datos históricos que ayudan a conocer la época para hacernos una idea del tiempo en que vivieron estas mujeres que lograron hacer de su vida lo que ellas quisieron y no lo que otros dispusieron. Andaron su propio camino, con mucho coraje y trabajo duro, nadie dijo nunca que el camino propio fuera fácil, pues no suele estar trazado.

Los reflejos en los que mirarse son importantes, seamos hombre o mujer, no es bueno que los demás nos impongan el futuro, la autoestima está en juego. Los niños de hoy y mañana deberían de encontrar este tipo de libros en las escuelas. Ellas para saber que otras vinieron antes y que sí pueden dedicarse a su sueño. Y ellos para ver en ellas a compañeras e iguales, dejando de lado el papel de mujer sumisa y abnegada cuidadora que nos habían transmitido durante generaciones. Quiero un mañana sin silencios, hombres y mujeres que caminen juntos, sin agredirse, como iguales ante el incierto futuro.