La mejor forma de enfocar la búsqueda de empleo.
Por María Elena Ayala.
La actitud no se ve, no se toca; pero si se siente, se materializa en nuestra vida a través de nuestros comportamientos y reacciones, ante multitud de acontecimientos vitales. La actitud no nace de la nada, no viene del vacío, es el resultado de un proceso mental que da forma a nuestra manera de afrontar el camino.
El poder de la actitud es muy grande, puede beneficiarnos si es positiva pero si adoptamos una postura negativa puede entorpecernos. La actitud no se da de manera aislada está influenciada por nuestros pensamientos, nuestra autoestima, por las expectativas,… una buena actitud será el mejor ingrediente para dar solución a los problemas,… depende de la actitud que adoptemos frente al exterior de como el exterior nos responderá. Somos nosotros los que influimos y trasformamos el exterior. Si actuamos de manera positiva nuestros resultados serán buenos, estarán acorde a nuestros pensamientos, a nuestras expectativas. A mayor autoestima y a mayores pensamientos positivos, la vida nos mostrara su mejor cara.
El libro nos habla de actitudes, de pensamientos negativos que influyen de mala manera en nuestra autoestima, de las expectativas que nos creamos respecto a la consecución de objetivos que nos proponemos. Considero que una mezcla de buenos pensamientos, una autoestima razonablemente alta y unas expectativas realistas conforme a nuestras metas y objetivos, nos ayudara a sentirnos más positivos y por ende a tener una actitud más positiva. En este caso, la autora nos habla de la búsqueda de emplea bajo una mirada psicológica a través de la actitud. A una actitud más positiva ante la búsqueda de empleo obtendremos resultados más realistas y acordes respecto a nosotros y a nuestras posibilidades y recursos. Nos propone una serie de ejercicios que ayudan a buscar empleo de una manera consciente y realista, una búsqueda que se base en nuestras potencialidades, en nuestros recursos.
Empléate con actitud es afrontar la búsqueda de empleo bajo una mirada positiva, consciente y realista respecto a los objetivos y metas que consideremos que podemos alcanzar. Es decir, optar a buscar trabajo respecto a lo que nosotros podemos ofrecer y también conociendo el entorno y/o la empresa a la que ofrecemos nuestros servicios.
De todos es sabido que emplearse en los tiempos que corren no es fácil por la situación del mercado laboral, pero nadie dijo que fuera imposible. Es hora de sacar lo mejor de nosotros mismos, de innovar, de buscar alternativas, de ponerle conciencia a la situación,… de afrontar las cosas con una buena actitud ya que así nos frustraremos menos y los acontecimientos más desagradables los veremos y analizaremos desde otra perspectiva .