“Otro caso del inspector Ernesto Trevejo”
Por Ana Olivares.
Os presento la segunda entrega de la serie policíaca protagonizada por el inspector Ernesto Trevejo. Ambientada en la España de los años cincuenta un nuevo caso aguarda su pericia como investigador: un hombre armado ha aparecido muerto en el monte de El Prado cerca del palacio donde reside Franco. Todo hace pensar que se trata de un intento frustrado de atentado contra el Caudillo, pero no están seguros y la información que manejan es delicada. Por eso le encargan a Trevejo este asunto, su discreción y su dedicación aseguran buenos resultados. Tendrá que recorrer los bajos fondos de Madrid y entrevistarse con las élites dominantes del momento para recabar información mientras lidia con un “compañero enchufado”, sobrino del comisario y la amenaza de un asesino a sueldo que va dos pasos por delante de ellos…Muy interesante ¿verdad?
Reconozco que no sabía que se trataba de la segunda entrega de una saga policíaca, pero se agradece que los libros se puedan leer de forma independiente ya que están basados en el trabajo policial de un personaje principal. Además, cómo la historia personal del inspector Trevejo es incipiente, tampoco perdemos información relevante en este sentido. Encontramos en este personaje una personalidad marcada, con un no sé qué viril y sensible -para la época- que engancha; aparte, claro está, de su capacidad para limitarse a cumplir con su deber, sin juzgar, sin decantarse por ningún bando declarando que no le interesa la política. Esta neutralidad que lo caracteriza nos sirve de puente entre ambas realidades enfrentadas que dominaban la sociedad en la época: franquistas y comunistas; estos últimos aún operaban en la clandestinidad.
Por fortuna esto sólo es el marco histórico de la novela, ya que se centra de lleno en la apasionante investigación policial donde el argumento se irá ramificando hasta conseguir una trama repleta de acción y suspense. De hecho el ritmo de la novela es el adecuado, posee la intensidad necesaria para captar tu atención, y casi sin darte cuenta, serás incapaz de despegar los ojos de sus páginas.
Luis Roso, no sólo nos regala una ambientación histórica enriquecedora, sino que recrea de forma fiel cómo sería la sociedad y la mentalidad de una de las épocas más oscuras y convulsas de nuestro país. Todo desde el más absoluto respeto, demostrando cierta madurez que aún no han adquirido algunos escritores cuando tratan un tema tan doloroso aún cómo la Dictadura Franquista en España. Debo reconocer que me ha ganado la pequeña reflexión final del supuesto líder de la cúpula comunista de la época. Me recordó a mi abuelo en sus últimos días, cuando hizo un verdadero balance de lo que perdió en su propia lucha ideológica.
Luis Roso es Licenciado en Filología Hispánica por la Universidad de Salamanca, en Filología Inglesa por la Universidad Autónoma de Barcelona y posee un máster de Literatura Española e Hispanoamericana. Actualmente trabaja como profesor de literatura que compagina con la escritura. Con este currículo no entiendo por qué muchos críticos apelan a la edad de nuestro autor, ya que ha demostrado que con una idea y algo de talento se pueden escribir maravillosas historias como esta.
Hablamos de un thriller de raza, donde la venganza y las afrentas personales se entremezclan con la política de los años cincuenta en España. Un tema aún latente en la mente de muchos españoles.