UA101349465-1

Si mis pensamientos viesen la luz, os dejaba a todos ciegos de Anabel García. 

k

por Susana Flores García

Dos soles destinados a estar juntos.

Esta semana os presentamos una novela romántico erótica con mucha comedia; una solución fresca con la que mitigar estos días de calor.

La historia nos habla de Carla, una joven que ha tenido una infancia complicada junto a su hermana; ya que ambas fueron criadas por una abuela bastante peculiar que les inculcó la creencia de que el Universo tiene escrito tu futuro, y el de todas las almas. Debido a esta estrecha relación con las artes esotéricas, nuestra protagonista se gana la vida echando las cartas del Tarot en un programa de radio junto a su amigo Chema, donde hacen lecturas de cartas en directo y se dedican a vaticinar el futuro de cientos de oyentes y consultantes; mientras que ella se da cuenta de que mantiene una vida monótona. Vende magia y predicción y se queda con el humo, con las sombras de lo que podría ser ya que se conforma con un medio amigo con derecho a roce llamado Óscar, al que ve mientras éste cuida de su madre. Pero a la mañana siguiente, la misma rutina, los mismos pasos, sigue el mismo camino, las mismas acciones una y otra vez, y está cansada. De hecho, cómo si el destino la hubiese escuchado, un día recibe una llamada anónima de un misterioso hombre que tiene una tentadora oferta de trabajo para ella… ¿Será el destino o es un pervertido que la ha tomado por idiota? ¿Qué dicen las cartas?

Pero Carla piensa que es una señal. Ha llegado el momento del cambio. Si pretende avanzar y que su vida sea distinta, deberá tomar otras decisiones, aunque sean arriesgadas. Por eso acepta el trabajo en “Last chance”, una nueva vida en la que ella y sus compañeros deben fingir ser parejas en crisis y después reconciliarse. Es una especie de estudio por el que les pagan bastante bien, por lo que no ve objeción alguna en convertirse en una especie de actriz. Pero con lo que no contaba ella era con que se iba a enamorar de verdad. Cuando Eydan entra en la ecuación cae rendida en su propia farsa, que deja de serlo, ya que para ella, él lo es todo. Él es todo lo contrario, no le teme al amor, es muy responsable y maduro, con ese punto canalla que la vuelve loca. Y cómo ya se sabe que el dicho de los que se pelean, se desean, es cierto, cada día la tensión sexual crece entre ellos. Por otro lado tenemos a Susi, una de las compañeras de trabajo de ambos que pondrá el punto más divertido con sus comentarios y ocurrencias, y que desempeñará un papel fundamental en la novela.

En esta historia tenemos momentos tan divertidos como surrealistas. Gracias a ellos, su autora consigue que la lectura sea muy ligera, incluso en los apartados más duros donde muestra su lado más sensible.

Aunque he de reconocer que ha habido momentos en los que la trama me ha parecido algo plana, con argumentos repetitivos que se resolvían gracias a las acciones de los propios protagonistas, quienes nos devuelven el ritmo que esperamos en una novela de este género. Personalmente, la historia en sí y el argumento me han parecido muy originales a pesar de decaer en algunos capítulos. La relación entre Carla y Eydan me ha parecido por momentos tóxica y enfermiza, sin embargo es la familia de él quien pone el grado de toxicidad más alto; sobre todo, por esa relación tan dependiente que poseen. Al menos mis expectativas han sido cumplidas conforme he ido avanzando en la historia, ya que no me esperaba más que el típico cliché romántico. Todo lo contrario, encontraremos otros matices, cómo amor y diversión, y con un precioso epílogo que pone punto y final a una novela de altura.

Si mis pensamientos viesen la luz, os dejaba a todos ciegos de Anabel García
Share This