Cuál es tu tormento de Sigrid Nunez
por Vanessa Díez Tarí
Estos meses han estado entre «Desmorir» (Una reflexión sobre la enfermedad en un mundo capitalista) de Anne Boyer, «Minbizia» (Un viaje a través de la enfermedad) de Olatz Vázquez y «Cuál es tu tormento» de Sigrid Nunez. Quizás lo hubiera llevado mejor si me hubiera lanzado a la novela histórica que tantas veces me ha refrescado el cerebro. Pero el año pasado un error de alguien en el hospital hizo que no existiera mi cita con la ginecóloga, sí mi cita anual para revisar la endometriosis. Y ahí andaba yo entre crisis y crisis buscando respuestas. La enfermedad avanza y tan sólo quien lo ha pasado puede decirte cómo ha sido.
En «Cuál es tu tormento» la autora se acerca a los cuidados durante la enfermedad. Cuando se acerca el final necesitarás a alguien que esté y te coja la mano. Sigrid Nunez nos abre esa conversación. Esa comunión con el otro. En nuestra sociedad cerramos los ojos al dolor. Los psiquiatras no dejan de recetar en este país. No somos distintos ante la muerte. La autora es esa mano en el limbo del final cuando no estamos dispuestos a dejarnos ver vulnerables y débiles hacia el final. ¿A quién le pedirías que se sacrificase por ti y te ayudase en la muerte? Plantea un debate sobre la eutanasia en las enfermedades crónicas. Hay muchos que aún en sus cabales hacia el final prefieren dejar de sufrir y abandonar este mundo con algo de dignidad. Juzgar es sencillo. El dolor nos cambia. Nos convierte en seres grotescos de lo que un día fuimos y nos engulle hacia la oscuridad. Nos perdemos.
«Morir es un papel que desempeñamos como cualquier otro papel en la vida: qué pensamiento tan perturbador. Nunca estás seguro de tu yo verdadero salvo cuando estás solo, pero ¿quién quiere estar solo al morirse?» Sigrid Nunez nos desgrana un viaje sin mayores pretensiones. Rodea la cuestión de cotidianidad y nos adentra lentamente en los días que compartieron juntas. Nos aclara cerca del último tramo que pensó en un diario y finalmente desechó la idea. Cómo escritora ciertas cuestiones te plantean dilemas morales. Qué contar y qué callar. Dejar retazo de intimidad en el olvido. Y en estas cuestiones más bien tendrás esa imagen golpeándote el corazón, porque duele despedir a los seres amados. Y al final ya no importan las disputas, ni que tuvieras que limpiar, ni el mal humor. Ya sólo piensas en los abrazos perdidos y en qué la besaste por última vez sobre su frente ya fría. Y en la última conversación.
Sigrid Nunez nos ofrece situaciones que nos muestran cómo ha ido cambiando su amiga. Todo aquello que ya no puede hacer tras la quimioterapia. Las partes de ella que no volverán. Su afán de lectura ha desaparecido. Su concentración. Pensar en la muerte es inevitable si ya llega. Y muestra a su amiga en el vídeo de un estudio sobre la enfermedad. Mujeres mostrando a cámara. Y aún así siendo sus propias actrices. Qué dejar ver y qué no. Algunas historias de la terapia de grupo abandonada. Nadie puede hacer tu camino por ti. Siempre la vulnerabilidad se guarda tras la puerta de casa.
«Bienaventurados los que lloran a los muertos».