La sombra del impostor de Alberto Caliani
por Lara Vesga
La sombra del impostor de Alberto Caliani
Andaba desde hace un tiempo detrás de un libro de aventuras que me tuviera atrapada durante unos cuantos días cuando cayó en mis manos La sombra del impostor. Quise saber por qué el famoso escritor Juan Gómez-Jurado decía del libro que le había tenido en vela hasta las cinco de la mañana y que consideraba la novela una de las mejores que había leído en su vida. Al llegar al punto y final entendí todo.
Corrupción, planes maquiavélicos, locura, supersticiones, violencia, intrigas, mentiras que perduran a través de los siglos y unos personajes que enternecen, divierten y asustan a partes iguales pueblan la novela. Tenemos a un implacable inquisidor que inspira tanto terror que traspasa las páginas y que hará que hasta el lector duerma con un ojo abierto y otro cerrado, por si acaso. Tenemos a una joven ingeniera adelantada a su tiempo y considerada por ello una bruja por parte de la Inquisición. Tenemos a un padre y un hijo con una profunda relación de amor-odio. Hay una adolescente que huye de su pasado aunque ello le cueste la vida. Hay también unos cuantos agitadores disfrazados con máscaras que pretenden que el hombre prevalezca sobre la fe. También un borracho deslenguado que al principio da asco y al final enamora, y, como guinda, un asesino que acecha entre las sombras y que más bien parece un fantasma. Y todo ello con el telón de fondo del Turín y la España del siglo XVI.
Tras ganar dos premios Hislibris 2021, Alberto Caliani (Ceuta, 1963) vuelve para narrar una auténtica epopeya que engancha desde el principio hasta el fin y que te deja grabados a fuego a todos sus personajes, especialmente a Zephir de Monfort, el despiadado inquisidor que es sin duda el peor villano literario que me he encontrado yo en mi vida, y mira que me he encontrado con unos cuantos.
En La sombra del impostor las situaciones límite se suceden, lo que hace que el ritmo de la novela sea vertiginoso. Además, tanto la trama como los magníficos diálogos entre los personajes harán que vayamos alternando las risas, los lloros y el más puro pánico. Este thriller renacentista con escenas no aptas para estómagos sensibles es sin duda la novela más redonda que he leído en lo que va de 2023 y sospecho que el año terminará sin que nadie le arrebate ese título.